Tres meses, casi una veintena de partidos y muchas especulaciones. Ha convertido los últimos días del mes de Noviembre, en la semana negra de los banquillos.
El primero en caer fue el ex-técnico de Valencia, Unai Emery, incapaz de hacer funcionar al Spartak de Moscú. Días más tarde nos enteramos de la fulminante destitución de Roberto Di Matteo y hace pocas horas, el nuevo presidente del Espanyol le ha enseñado la puerta trasera a Mauricio Pochettino.
Tres grandes técnicos y tres modelos diferentes. Hace pocas décadas eran ellos los que se calzaban las botas y desde entonces han intentado plasmar con mejor o peor suerte, su forma de entender el fútbol.
La destitución a mi parecer más sorprendente y de la cual hablaremos hoy, ha sido la del italiano Roberto Di Matteo.